EL HACEDOR DE ZUECOS


 


Había   nacido  como toda  la familia, en una  aldea  de  Laracha, en la Galicia rural a  principios del siglo  XX.

 Poco a  poco se  dieron  cuenta que el  niño   era sordo.

En aquellos tiempos  tan solo los que  habían gozado de buena audición  usaban una trompetilla. Pero  para  aquél niño  nada  había  que  le acercara  la  comunicación  con  su  entorno.

Nunca se  supo muy bien  cómo o quien  le enseñó  hacer  zuecos  de madera. Más  aún, ni familia  ni  vecinos  supieron jamás  que hubiera  en las  aldeas más  cercanas  algún  zoqueiro.

Lo  cierto que el  mozo  tomaba  en sus fuertes brazos  varios  trozos de  madera, los metía a  una bolsa  y  marchaba  orondo hasta  la  iglesia del lugar. 

Nadie sabía  cómo,  pero se encaramaba al  campanario  y  allí  a pleno  sol   fabricaba  los  zuecos. Hasta que el  hambre  le  vencía  y  bajaba  de  la torre  con su  obra  metida en la  bolsa  y  otra más pequeña   y larga   donde  portaba  los restos de  madera  que  se dejaba alrededor  del  cuello  como bufanda.

Ilustración: Museo  Etnológico de Cantabria / Wikipedia / Zueco

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Cuento de aroma oriental
Y cierto regusto a meiga,
Con perfume del Punjab
Y sabrosura gallega.

Sincretismo original,
Con la magia de dos tierras
Cuya singularidad
De la magia se alimenta.
l'imposteur ha dicho que…
Relato enigmático y sugestivo, que dice más de lo cuenta. Una experiencia que sin duda tiene un fondo real, biográfico, pero cuya expresión comunica un ámbito irreal: el niño, sordo de nacimiento; la ciencia infusa que poseía, nadie sabe cómo; su empecinada dedicación hasta lograr la obra acabado, solo interrumpida por el hambre, ¿qué tipo de hambre?; el detalle de la bufando de virutas al cuello es la clave, el gesto que da carta de naturaleza a la verosimilitud de lo narrado... O eso, o... una deslumbrante imaginación que con un rizo narrativo logra colocar el relato al nivel del surrealismo.

Corto y devoto, Beatriz. Pura magia.

Gracias por tu propuesta.
Beatriz Basenji ha dicho que…
ANONIMO: Belleza de POESÍA!! Me ha sorprendido muchísimo. Es un relato muy sencillo. Que ha partido de una realidad que palpitaba en esa aldeíta galaica !! UN ABRAZO !!
Beatriz Basenji ha dicho que…
l'iMPOSTEUR: Este relato tiene una vigencia que traspasa el tiempo. Como cuando vi por primera vez unos dibujos de las Pirámides de Egipto y un croquis de una escalera subterránea que conducía al interior de la Pirámide. Y desde entonces mi mente subía esas gradas al comienzo de cada juego. GRACIAS L'IMPOSTEDUR por tus visiones exactas !!

Entradas populares

Vistas de página en total