ALGO MAS QUE LA MENTE HUMANA
"El
asidero que nos quedaba, nuestra inteligencia, ha caído destrozado
bajo el rodillo de la evidencia que las máquinas inteligentes han
traído a nuestros días; siendo apenas borradores, meros ensayos en
el albor de una nueva ciencia, estos torpes prototipos de las más
complejas, sofisticadas y versátiles que habrán de venir mañana,
ya “nos han ganado la partida” [1].
Tareas complejas, solución de problemas, toma de decisiones, búsqueda de alternativas creativas, pueden resolverse y ejecutarse a través de los intrincados algoritmos de computación sobre los que se fundamenta la actividad de estos dispositivos de Inteligencia Artificial (IA)."
Tareas complejas, solución de problemas, toma de decisiones, búsqueda de alternativas creativas, pueden resolverse y ejecutarse a través de los intrincados algoritmos de computación sobre los que se fundamenta la actividad de estos dispositivos de Inteligencia Artificial (IA)."
“Mas
que monos y máquinas: la mente humana se resiste a la reducción”
Juan
Pedro Núñez Partido
Tendencias21.net
/ 5 / 11/ 2014
[1]
En referencia a la partida de ajedrez que “Deep Blue”, la
computadora diseñada por IBM, ganó al campeón del mundo Garry
Kasparov en 1997.
Es
obvio que para un Científico, la participación de nuestro Ser
espiritual no aparece bajo los rayos de aquellos elementos que
indagan nuestras células.
Llegados
a ese punto quienes están relacionados con alguna disciplina
artística son quienes mejor pueden conocer de lo que se trata,
puesto que a todos ellos les sucede eso que llamamos Inspiración.
Esta Inspiración con seguridad también se hace presente en los
Científicos que investigan aquello que apasiona su intelecto.
Si
son conscientes de ello ya es otro cantar.Nuestro propio mundo
interior posee tal riqueza, que nos resulta del todo imposible
imaginar que esas máquinas inteligentes puedan lograr aquello que
nos es dado a nosotros los Humanos.Aún considerando la mas
inteligente de esas máquinas, es eso: una máquina, libre de las
emociones que vivimos cada uno de nosotros.Y hasta libre de una
memoria genética que es QUIEN nos ha traído hasta este escenario.
Es
tanto, tan grandioso y glorioso lo que los seres humanos podemos
llegar a conocer mediante nuestras capacidades de orden
espiritual, que así pudiésemos vivir 200 años con total salud , no
se agotaría. Nos ha llevado años lograr la plena identificación de
la estructura esencial del SER, porque es a través de nuestra Mente
humana - que actúa como un un vehículo - , que se manifiestan los
cinco cuerpos espirituales que se proyectan en cada uno de nosotros.
Mas aún:debiéramos tener siempre presente que SOMOS una
proyección de la Inteligencia Divina. Cuando lleguemos - con la
ayuda de esas máquinas super inteligentes o nó - a develar el gran
misterio de nuestra existencia como humanos, vamos a comprender el
permanente fluír de las "edades" del Universo que nos
contiene y nuestro ir y venir bajo distintos aspectos y
sensibilidades. Reside en nuestra Voluntad el desafío de esta
trascendencia.
Aquí
os dejo el link para acceder al artículo completo:
http://www.tendencias21.net/Mas-que-monos-y-maquinas-la-mente-humana-se-resiste-a-la-reduccion_a38363.html
Comentarios
Hoy toca IA (Inteligencia Artificial), ¡hum! Bonito y apasionante tema donde los haya. A nuestra mente acuden no sólo Deep Blue (sofisticada inteligencia robótica real creada para jugar al ajedrez mejor que un humano), sino HAL 9000 o Roy Batty, Pris o León (todos estos androides de la serie Nexus 6).
En el primer caso, la fría y tecnológica Deep Blue, se limitaba a ejercer, con eficacia y eficiencia, su tarea de supercomputación, al margen de emociones y voluntades; no más que operaciones matemáticas, cálculo de probabilidades y elección de la opción más apropiada a un problema matemático dado, todo ello a una velocidad y con una exactitud imposibles para el ser humano.
Deep Blue no utilizaba la intuición, nada sabía de conocimiento transversal o analógico, nada de asociación de ideas. Era todo cálculo. Por eso nunca, mediante esa línea, podría asimilarse a la inteligencia humana: le faltaba la emoción.
En cambio, la imaginación del hombre ha creado a HAL 9000, en la bellamente especulativa, "2001: A Space Odissey" (Stanley Kubrick, 1968); y a los superdotados, pero caducos, Nexus 6, de la no menos lírica e inquietante "Blade Runner" (Ridley Scott, 1982). En estos casos se contempla la posibilidad de que la inteligencia artificial, por su propia dinámica inmanente, acabe por generar facultades emotivas. Çes una especulación, pero a nadie se le oculta que es un a posibilidad apasionante y nada descabellada, máxime si uno está al corriente de las últimas investigaciones físicas y biológicas.
Lawrence Krauss, prestigioso científico e investigador educado en el MIT, en su clarificador (aunque, por momentos abstruso) libro "Un universo de la nada" da ciertas claves para admitir la posibilidad de que la vida surgiera, de alguna por el momento desconocida, aunque barruntada, forma, de la "nada", por generación espontánea.
Pero claro, es que a lo largo del libro, y mediante las pruebas más modernas realizadas hasta el momento, lo que concebimos como nada, en una más que comprobable realidad, no existe. Es decir, que donde creemos se ubica la nada, hay algo, y un algo con una actividad inusitada. Quizás — colige—, se trate del "perpetuum mobile", esa entidad que algunos (en casi todas las culturas) llaman Dios o causa primera (que no lo sería, de hecho, pues "siempre había estado ahí").
En todo esto siempre chocamos con el lenguaje y la interpretación, con los prejuicios y las culturas levantadas sobre patrañas imaginarias (teodiceas y religiones de toda laya), y no es fácil sostener un debate entre quienes se ubican en lugares diametralmente diferentes (quienes creen en el "más allá", no más que basados en la fe y la especulación; y quienes creen en el más acá, apoyados en la ciencia, la investigación y el conocimiento).
¿A dónde puede llegar la IA? ¿Algo más sofisticado que Deep Blue, pero carente de "corazón"? ¿O algo más parecido a un HAL 9000, o Nexus 6, sin ansias vengativas? No lo sé, lo que me atrevo a barruntar es que ambas líneas tenderán a converger.
Porque, amiga Beatriz, creo que bajo el paraguas del Espíritu, más allá del recurso a la lírica o la imaginación creativa, no hay más que un gran espacio, para nada vacío, donde todo está inmerso y donde todo acaece. Nuestra conciencia de este "espacio" es lo que nos da la autoridad para especular sobre ello, pero nada más: certeza, ninguna... hasta que se demuestre lo contrario.
Un abrazo a todos.
Un saludo.