VISIONES
Ella está empeñada en
mostrar algo que ha
comprado recientemente. No he
podido rehusarme.
Trato de desviar
su interés en una
conversación que podría ser
hasta brillante, mientras miro
desde mi butaca la
foto que mostrará luego.
Lo que veo
es una dama
que surge de una
pared vestida con una
túnica blanca, con infinitos
pliegues que obedecen al
recorte magistral del
alto escote. Ella porta
un alto rodete
de los que usaban
mujeres de los
pasados siglos. Nada se
adivina de su rostro.
Parece apoyarse en una
pared milenaria que puede estar
en alguna calle oculta
de la imperial
Roma o de
Nápoles. Pero lo
cierto es que esa
pared está en un
departamento de la ciudad
de Buenos Aires, en alguno
de las
zonas de la gente
elegante.
El té se ha
quedado frío en mi
taza. La anfitriona está
dichosa como una
quinceañera. Lo cual es
raro a nuestras
edades.
Finalmente me lleva
junto a su reciente adquisición.
Enciende las luces
y ahí está .
La obra es
una fotografía de
Julie Mendez Ezcurra
que realizó fotos
imposibles de olvidar , durante
su breve vida.
Quien ha posado en esa
foto es Jorge
Luis Borges , sentado y
apoyado en su bastón. No hay
ninguna dama romana
junto a la pared.
Solo un sólido
mueble que sostiene
algunos libros .Mas allá hay un
sillón vacío , idéntico
al que ocupa Borges. En el
piso está Beppo, el
gato. Ella ha captado
el mundo íntimo de
Borges tal como
un marino solitario
se desplaza a
bordo de su
velero por algún
mar infinitas veces
navegado. Es el
Hombre y su Alma.
Cuando dejamos esa
habitación , y la penumbra
vuelve a enseñorearse del
lugar, me doy
vuelta y la
veo otra vez :
la dama romana
o hebrea de tantos
siglos ¡!
Foto: Julie Mendez Ezcurra / Wikipedia.
La foto de Julie Mendez Ezcurra que motiva este post.
Comentarios
Un retrato magnífico. Un abrazo
Beatriz.
Un abrazo.
Gracias, Beatriz, por este primaveral brote.