ADOLF MERCKLE
Los bancos acreedores han salvado al grupo empresarial Merckle con un crédito de 400 millones de euros (544 millones de dólares) pero le obligan a vender el productor de medicamentos genéricos Ratiopharm, dos días después del suicidio del patriarca Adolf Merckle, de 74 años. El millonario, el quinto alemán más rico según Forbes, se suicidó precisamente por las dificultades para manejar la enorme deuda que había acumulado tras apostar a la baja por Volkswagen y perder 400 millones en Bolsa.
Elpaís.com/Agencias 07/01/2009
Cuando a mi Mujé la acometen los malos humores, suele yamarme “El Perito en Crisis” .
Lo cual no es verdá. Es cierto que he visto crisis de tóos los tamaños y tóas las lágrimas que se puedan verter, a lo largo y ancho deste Mundo.
Cuantos de nosotros hemos sío arrojados en argún momento de nuestra vía ar foso de los leones, como er Profeta Daniel? Y muchos, pero muchos, fuimos rescatáos.Pero somos los menos. Y a ese “menos” del que somos una partícula pasajera, abro er corazón por los que estan en crisis.
Una sola frase os digo: no se rindan. Sigan golpeando puertas que alguna se abrirá.Con una única condición: golpead con FE.
Esta frase me la prendió un amigo, dueño de una empresa constructora, desos que se inician desde abajo.Estudiando por las noches logró er título de Maestro Mayor de Obras. Mérito propio a su esfuerzo y perseverancia. Y se largó a construír ayá ande le saliera la oportunidá. Se anduvo hasta por zonas lindantes con la selva, por el Chaco argentino.Luego se fué viniendo a la civilización y se levantó escuelas,fábricas, casas pa la gente del campo y la ciudá. Cien obreros tenía en su empresa, que, considerando a Adolf Merckle - patron de cien mil trabajadores! - mi amigo era un alguien mínimo.
Pero la cosa empezó a desbarrancarse y la gente fué edificando cada vez menos, y mi amigo se entró a poner hipertenso, no dormía a las noshes, y se la pasaba pensando como seguir manteniendo sus cien obreros. Que tus cien obreros son cien familias que dependen de tí. Son vidas, destinos,sueños, ilusiones.
Adolf Merckle- como mi amigo - eran hombres yenos de buenas ideas, emprendedores, optimistas por naturaleza. Jamás este hombre habría barruntado que la crisis global se cebaría en su persona.Cuando miras hacia atrás y contemplas como fuiste armando tu fortaleza, no pués entender que sin haber pasao siquiera un huracán, un sismo violento,un incendio,ná de ná, eso que estas viendo son tus propias ruinas.
Tóo intacto. Pero los bancos te han acorralao, naides te concede un miserable euro, y sus lenguas son mas afilás que la espada del Cid Campeador.
Jaque mate, compañero.
Te arrojas ar paso del tren y 48 horas después , los putos bancos te conceden lo que te habían negao.
Elpaís.com/Agencias 07/01/2009
Cuando a mi Mujé la acometen los malos humores, suele yamarme “El Perito en Crisis” .
Lo cual no es verdá. Es cierto que he visto crisis de tóos los tamaños y tóas las lágrimas que se puedan verter, a lo largo y ancho deste Mundo.
Cuantos de nosotros hemos sío arrojados en argún momento de nuestra vía ar foso de los leones, como er Profeta Daniel? Y muchos, pero muchos, fuimos rescatáos.Pero somos los menos. Y a ese “menos” del que somos una partícula pasajera, abro er corazón por los que estan en crisis.
Una sola frase os digo: no se rindan. Sigan golpeando puertas que alguna se abrirá.Con una única condición: golpead con FE.
Esta frase me la prendió un amigo, dueño de una empresa constructora, desos que se inician desde abajo.Estudiando por las noches logró er título de Maestro Mayor de Obras. Mérito propio a su esfuerzo y perseverancia. Y se largó a construír ayá ande le saliera la oportunidá. Se anduvo hasta por zonas lindantes con la selva, por el Chaco argentino.Luego se fué viniendo a la civilización y se levantó escuelas,fábricas, casas pa la gente del campo y la ciudá. Cien obreros tenía en su empresa, que, considerando a Adolf Merckle - patron de cien mil trabajadores! - mi amigo era un alguien mínimo.
Pero la cosa empezó a desbarrancarse y la gente fué edificando cada vez menos, y mi amigo se entró a poner hipertenso, no dormía a las noshes, y se la pasaba pensando como seguir manteniendo sus cien obreros. Que tus cien obreros son cien familias que dependen de tí. Son vidas, destinos,sueños, ilusiones.
Adolf Merckle- como mi amigo - eran hombres yenos de buenas ideas, emprendedores, optimistas por naturaleza. Jamás este hombre habría barruntado que la crisis global se cebaría en su persona.Cuando miras hacia atrás y contemplas como fuiste armando tu fortaleza, no pués entender que sin haber pasao siquiera un huracán, un sismo violento,un incendio,ná de ná, eso que estas viendo son tus propias ruinas.
Tóo intacto. Pero los bancos te han acorralao, naides te concede un miserable euro, y sus lenguas son mas afilás que la espada del Cid Campeador.
Jaque mate, compañero.
Te arrojas ar paso del tren y 48 horas después , los putos bancos te conceden lo que te habían negao.
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