N A V A L N Y
Voy a
rendir homenaje, a un hombre
que alguna vez
soñó una RUSIA
democráctica.
Una
RUSIA donde cada persona fuera respetada en sus derechos
civiles, que pudiera
caminar por cualquier
calle de su Pueblo,
con la seguridad que otorgan
las leyes de
libre circulación, etc.
No en una
RUSIA prisionera, despojada de
TODOS SUS DERECHOS
CIVILES. Que tener
los tiene, pero NO SE
CUMPLEN.
Tanto VLADIMIR
PUTIN COMO CADA
UNO DE LOS MIEMBROS
DEL KREMLIN SON
CULPABLES de la
muerte de NAVALNY.
Trataron de
envenenarlo hace algunos
años, pero fue llevado
a ALEMANIA donde
se le libró
de morir envenenado.
No han sido
pocos los que fueron
envenenados por el régimen
de PUTIN; tendríamos que remontarnos
a 2OO6, año
en que un
señor LITVINENKO fue a
reunirse una mañana
con unos colegas del mismo oficio
que él: eran Espías.
“Las imágenes lo
muestran al entrar al conocido Millenium Hotel,en Mayfair, en
pleno corazón diplomático de Londres. Dentro del hotel Litvinenko tomo solamente un te, con
polonio radiactivo . 22 días
después, estaba muerto.”
Esta historia
se ha repetido infinidad de
veces, dentro y
fuera de Rusia.
Es el estilo
del VLADIMIR PUTIN.
Foto: EL DINAMO.cl/ Confirman la muerte de Alexei NAVALNY/16 / 2 / 2024.
Comentarios
Putin, el malhadado heredero, con ínfulas de zar, ha ido manejando progresivamente el gobierno con una mano férrea asimilable a la época de la URSS tras la muerte de Stalin (que, a pesar de los pesares, a tanto no llega este aprendiz de brujo dictador). En su quehacer político, este ex-agente de la KGB, ha adoptado lo peor dela Rusia zarista y parte de lo peor del régimen soviético.
Navalni ha sido un héroe ruso en el que se cumple aquel título de la celebérrima obra de García Márquez: Crónica de una muerte anunciada. Y como todos los héroes que se precien (a pesar de que nos pueda resultar que su decisión de volver a su país, como quien se mete en la boca del lobo, fuera una solemne estupidez) despreció su vida por ser coherente con sus principios y su voluntad. Se lo jugó todo a una sola carta, cuando todo el mundo sabía que la banca (rusa) no tenía intención de repartir ninguna carta más. Les facilitó el trabajo. Está claro que Putin no consiente ni contempla la más mínima disensión dentro de sus fronteras, y no sólo eso, sino que es capaz de perseguir a los que disienten más allá de sus fronteras, para acabar con ellos, saltándose todas las leyes internacionales. Meros asesinos. Purgadores irredentos. Será cosa del carácter (como el hispano lo es el ser cainita).
A Navalni se le recordará como aquel hombre que vivió para ser héroe, entregando su vida sin ningún sentido, sin ninguna necesidad, sólo por convicción, que es la razón de los héroes más sublimes (e inútiles).
Gracias, Beatriz, por el homenaje y la oportunidad.