LA BOLA DE CRISTAL
Me
ha llamado nuevamente mon ami Pierre, que a su vez había
recibido un mensaje de Monsieur Françoise Hollande desolado por
los cómputos del fatídico 25M.
Aún
no os he revelado que mon ami Pierre es el tarotista mais grande
do mundo, al decir de otro tarotista brasileño. Grandes
personalidades le convocan a sus despachos o le van a visitar al
subsuelo donde reside, para realizar sus consultas al oráculo.
(Con perdón de la palabra )
Pierre
le había augurado su triunfo electoral, el que le llevó a
ocupar la Presidencia de Francia. Vaticinar un triunfo es de lo
mas fácil. Lo grave es augurar una derrota! Creedme, ahí sí
que no alcanzan ni los eufemismos de ciertos políticos que se
las ingenian para abarrotarse de palabras y palabrejas - tal
como los hamster lo hacen acaparando la comida entre sus
carrillos– con tal de no decir nada.
Monsieur
HOLLANDE pues, le ha llamado a Pierre para que indague por cuáles
caminos debe avanzar a fin de que el Pueblo vuelva a confiar en
su gobierno.
“Monsieur
Prèsident hacer feliz al Pueblo no es difícil! Es como criar a
un bebé: Alimentarlo bien, cambiarle los pañales cada 4 horas,
tenerlo limpio y calentito !Pero por sobre todo cariño , mucho
cariño, mucho mimo ! “
F.H.
Se quitó los anteojos muy perplejo, queriendo traducir a buen
francés lo que mon ami Pierre le había revelado.
En
ese mismo instante sonó el celular de Pierre . Oh, sorpresa,
eufórica Marine Le Pen le solicitaba con urgencia un turno !
Apenas
pudo responderle: “Le llamaré, estimada señora! Estoy en una
reunión muy importante!”
Para
salir del paso raudamente, Pierre le indicó a Hollande que se
comprara un ejemplar del
I CHING. “ Ahí encontrará la
respuesta a todas sus inquietudes, Monsieur Prèsident! Si le
consulta a diario tenga la seguridad que sus medidas de gobierno
no van a fallar!”
Se
estrecharon las manos y Pierre regresó a sus espacios
particulares.
Esta
madrugada Françoise Hollande fue alertado por alguno de sus
informantes de Washington, que le dijo que “ los Estados Unidos
harán efectivas las sanciones contra Irán, Sudán y Cuba,
obligando al BNP Paribas - por haber pagado en dólares
transacciones con estos países - a resarcirle la suma de diez
millones de dólares ( 7,3 millones de euros ) por considerar
haber aplicado reglas no autorizadas por los Estados Unidos. “
También está en discusión la pérdida de la franquicia
bancaria por parte de BNP Paribas.
Hollande
enfurecido gritaba: “¿Qué deberíamos hacer nosotros, los
europeos, que fuimos perjudicados en forma directa hace OCHO
años por las hipotecas basura que Lehmann Brothers y otros
buenos muchachos de la banca americana nos vendieron en paquetes
cerrados ? “
A
lo que Pierre apenas pudo susurrarle: “Es lo que sucede
Monsieur Prèsident cuando nuestros banqueros no tienen al
menos UNA bola de cristal !”
¿Podéis
creerlo ? Hollande se puso a reír a carcajadas !
Comentarios
Brave la France que vota a le Pen, la France xenófoba y chauvinista.
Buen post. Un abrazo.
¿Qu'est ce que c'est l'Europe? ¿Alguien lo sabe? ¿Un mosaico de estados en trance de disolverse? ¿Una taracea de voluntades mirándose el ombligo? ¿Una ilusión, acaso? ¿Un sueño? El tonante Zeus, otra vez, está presto para raptarla, lo que es tanto como decir, desubicarla, trastocar su estado para llevarla a Olimpos improbables que siempre acaban como el rosario de la aurora. ¡Qué se puede esperar de este mentido robador, que diría Don Luis!
Pobrecita Europa, tan coqueta ella, tan siempre adolescente (pues que siempre está adoleciendo de algo), tan impenitentemente lozana en su vetustez (pues que nunca acabó de formarse del todo), amenazada por ensimismamientos y egocentrismos, subyugada por cantos de sirena, acoj...ada por temores infantiles, incapaz de hacerse por fin una mujer como el euro manda.
Adenauer, Delors, Köhl, Palme, González,... ¿qué fue de vosotros? ¿Dónde paran vuestros buenos propósitos? ¿Qué se hizo de aquel residuo que quedó en el fondo de la caja de Pandora? No parece sino que son las furias quienes campan a sus anchas. Furias que ahora llevan el nombre de xenofobia, insolidaridad, nacionalismo infantiloide, temor al otro, enajenación de la verdad (todos estamos en el mismo mundo: aquí nos salvamos o nos condenamos todos a la vez).
Ya lo he dicho: triste es esta deriva. Pero más triste es la abdicación (ésta sí, la otra, regia, no) que los ciudadanos que conformamos este espacio geográfico y cultural hagamos dejación de nuestra naturaleza "europea". No es necesario ser europeísta, bastaría con ser europeo, uno a uno, individuo a individuo, en vez de empeñarnos en permanecer en la inopia local, de frontera y concertina.
Hollande, Hollande, ¿porqué nos has abandonado? Pues ¿sabéis lo que os digo? que yo no pienso encomendar mi espíritu a las manos de ningún fatalismo, así se llame Dios. ¿Quieren lucha? Pues la tendrán.
Hay que comenzar, por ejemplo, pertrechándose de buenos argumentos. Como por ejemplo, lo que Jacques Le Goff (por citar a un paisano del citado) reflexiona en su excelente librito (más tratado o ensayo, que volumen) que lleva por título "La Vieja Europa y el mundo moderno".Imprescindible y esclarecedor.
Iré afilando la razón, y acorazando la voluntad.
Gracias, Beatriz, como siempre por la ocasión, tan bien traída y contada. Un abrazo a todos.