EL COLIBRI








Hibisco y colibrí.

Idilio verdiazul. Aladas fugas.

Zig zag. Zig zag.

Besar al vuelo abanicando polen

hasta agotar la miel.

Erudito bebiendo agua de lluvia.

Te adivina la luz y te recorta

origami

danzando en las auroras.



Mas, el orbe se acuna por tu celo. 



Beatriz  Basenji

15 / 04 / 2018

foto: Más México-Más México.

Comentarios

Albada Dos ha dicho que…
Preciosos versos, lectura oriental, de un ave especial que alegra el mundo

Un abrazo grande
Anónimo ha dicho que…
Y la poetisa —sacerdotisa de la palabra encantada— dirigió su mirada allende el mar, y depositó en las procelosas olas un poema hilvanado a sus ondas... "Arranca al silencio la palabra" —podía oírse como un ruego de latidos resonando en su pecho, mientras contemplaba alejarse el reclamo.

Y el Colibrí voló surcando el mar hasta donde moraba el silencio. Y el silencio, cuando el colibrí revoloteó ante él abanicando emociones por mucho tiempo contenidas, se inmoló desprendiendo llamas verdiazules.
Anónimo ha dicho que…
Y la poetisa —sacerdotisa de la palabra encantada— dirigió su mirada allende el mar, y depositó en las procelosas olas un poema hilvanado a sus ondas... "Arranca al silencio la palabra" —podía oírse como un ruego de latidos resonando en su pecho, mientras contemplaba alejarse el reclamo.

Y el Colibrí voló surcando el mar hasta donde moraba el silencio. Y el silencio, cuando el colibrí revoloteó ante él abanicando emociones por mucho tiempo contenidas, se inmoló desprendiendo llamas verdiazules.

Entradas populares

Vistas de página en total