TRAMPA PARA POLÍTICOS
“
Dos
ex-ministros de Exteriores británicos, Malcolm
Rifkind y Jack
Straw, el primero conservador y el segundo
laborista, han caído en la trampa que les tendieron unos supuestos
enviados de una compañía china que les ofrecían dinero a cambio de
influencia. Los emisarios eran en realidad periodistas encubiertos
del Daily
Telegraph y la cadena de
televisión Channel
4, que inmortalizaron sus reuniones con los
políticos con la ayuda de cámaras ocultas.
Estas grabaron cómo los
dos veteranos diputados explicaron a los falsos delegados todo lo que
podían hacer para la supuesta empresa china, gracias a " los contactos
y privilegios derivados de sus cargos y sus años de actividad
política.”
“Dos
diputados británicos, dispuestos a vender su influencia por dinero
“
Pablo
Guimon – Londres 23 /02 /2015
El
País, versión digital
Al
fin han vuelto los viejos tiempos de los escandaletes en el
seno del Parlamento británico !
Hacía
poco tiempo que había en nuestra casa un televisor, cuando una
noche pasaron una peli filmada a propósito del “Caso
Profumo”, un asuntiyo de los que de tanto en tanto sacude la
tradicional flema inglesa.
Lo
cierto que John Profumo, entonces ministro de Guerra del Reino
Unido, protagonizó un escandalete originado por sus descubiertas
relaciones con Christine Keeler, una showgirl que también
había tenido un affaire amoroso con cierto espía soviético –
no hay que olvidar que aquellos eran los tiempos de la famosa
guerra fría entre la URSS y USA – y que además involucraba
a cierto médico - el Dr. Ward - todo lo cual, bien agitado y
ventilado en un juicio , terminó arrastrando al entonces Primer
Ministro, Harold Mc Millan , que meses después debió
renunciar empujado por las circunstancias . Aquello había ocurrido
en 1963.
Dinero
por influencias es un trueque mas viejo que la Humanidad. ¿ No
estamos cansados nosotros mismos de escuchar de tanto en tanto,
alguno que otro de estos señores de bonitos relumbres en el campo
de la política, declarar que ellos están en esa actividad
pública precisamente para forrarse?
David
Cameron - antes de llegar al nº 10 de Downing Street –
hace cinco años representando a los conservadores, señaló que
la actividad de lobby desencadenaría “el próximo gran
escándalo” , declarando que endurecería las leyes sobre el
particular, pero nada de ello se ha cumplido. Ed Miliband, líder
laborista se ha dirigido al actual Primer Ministro solicitando
que ” se sume a su propuesta de prohibir que los diputados
ocupen puestos directivos o consultorías en la empresa privada”
.
¡Que
los ingleses siempre han tenido estos jugosos titulares
adornando miles de medios de prensa alrededor del
Mundo ! Es parte de la elegante retórica que aprenden en sus
famosas Universidades. Que por eso son lo que son .
Nos
contaba un amigo irlandés que ya no se encuentra por estos
Mundos, que uno de sus tíos abuelos había sido un Lord
inglés , y que a su muerte, no habiendo dejado descendientes
directos, él en persona se atrevió a reclamar el título
nobiliario para que continuara dentro del feudo familiar. Luego de
iniciar los trámites de su reclamación en una de las tantas
Embajadas del Reino Unido, recibió luego de un tiempo, una
escueta respuesta donde le solicitaban un millón de libras
esterlinas para activar el expediente.
Mi
amigo consideró que era una suma excesiva para tener derecho a
tomar un té con la Reina.Foto: John Profumo, en 2003.
Comentarios
Un abrazo
"Y saben aquel que dice..."
Nada nuevo bajo el sol. Tan antiguo como la prostitución (que al fin y al cabo no tan lejana anda...).
Pero, vamos a ver: ¿Que es que no cuesta labrarse un porvenir en la política? ¿Hacer carrera a base de tragar sapos y vomitar príncipes? Pues alguna rentabilidad habrá que sacársele, hijos de dios... Que las carreras no se corren solas, uno se las tiene que currar. Y una vez tocada "taina", ésta se ha de poner en valor.
Que esto ocurra en la Great Britain es lo sorprendente (antes uno lo ubicaría en alguna democracia de medio pelo, como la hispana —con perdón, pero sin arrepentimiento).
Vender caras las influencias es algo tan viejo como el mundo (incluso el mundo democrático —o, quizás, "ende mais"), pero el que suceda en la Pérfida Albión concede estatuto de autenticidad al mote.
Efectivamente muchos están donde están —en política— para forrarse (por más que las legislaciones garantistas invaliden las escuchas que tales comentarios escucharon), y dado que esto es un hecho, de tales polvos estos lodos. Algo que en el solar patrio hispano conocemos sobradamente, y que, así sobrevenga el apocalipsis de los corruptos, seguiremos conociendo si algún "poder" soberanamente popular no lo impide.
Estamos no sólo ya en lo de las llamadas "puertas giratorias", sino, llanamente, instalados en la desvergüenza del: "vosotros me elegís, yo, a renglón seguido, aprovechando la misma tinta y firma, hago caja". Esto es lo que sorprende de la sólida y "gentlemanesca" democracia inglesa: la rancia nobleza está reñida con los dividendos y la rentabilidad, pero no lo está la "nobleza" adquirida por el medro. Y así les va (y así nos va).
Cuando la nobleza empieza a pensar en servilismos tales como la utilidad
y la eficiencia deja de ser nobleza para adquirir otra naturaleza más mercantilista: la naturaleza del compra-venta, la del comercial que sólo piensa en el objetivo y no en el sujeto.
No sé si podremos... pero que deberíamos poder (o al menos intentarlo), eso es un hecho. ¡Muera la resignación paralizante y el conformismo idiotizante!
Gracias, Beatriz, como siempre, por proponer.
Un abrazo a todos.