SUPER MEDICINA




Tanto y tan bien le habían hablado de aquél país sudamericano, que mi amigo - hombre criado a orillas de una laguna - tomó hace unos años la decisión de visitar unos parientes que vivían en una de aquellas capitales sudamericanas ,donde en aquél tiempo eran atraídas multitudes,similar a lo que sucedía en Rumania en tiempos de la Dra. Ana Aslán.

Regresó maravillado contando que la primera sorpresa que tuvo ante sus ojos se la causó la esposa del pariente, de largas 6 décadas cumplidas con el calendario. Se la veía lozana y rozagante como lucía a los 30.

Más que admirado, mi amigo estaba algo confuso, porque la señora resultaba una gemela de una de las hijas. Confesaba también estar deslumbrado por los refinamientos de la capital de aquél País, al punto que cada baño público era un desafío a su inteligencia . Por empezar ,apenas usó el inodoro de una estación ferroviaria, observó que una película transparente circulaba sobre la tabla donde había posado su cuerpo , al momento que una catarata de agua caía en el interior del inodoro, sin que él hubiera impulsado botón alguno. Cuando avanzó hacia el lavabo, un chorro de agua tibia le cubrió las manos y al momento de retirar sus manos , el agua dejó de manar. Unas luces intermitentes le mostraron donde ubicar las manos para recibir una vaharada de aire poderoso que quitó la humedad de la piel.

Cuando quiso cruzar una calle de la zona céntrica, observó que un semáforo privilegiaba el cruce de los peatones y cuando éstos habían alcanzado la otra vereda, recién dejaba avanzar a los automovilistas. Y así que puso los pies en la vereda que recién estrenaba, un par de jóvenes se acercaron y le obsequiaron una flor natural, para que le luciera en el ojal del traje. Jamás había sido tratado de ese modo en su patria. Estos y otros detalles - contaba - le iba participando a los parientes .

Mientras conversaban fue descubriendo que aquél país tenía otras maravillas para ofrecer. El dueño de casa, muy ufano – señalando a su esposa le dijo que había sido obra de la Medicina la juventud que en ella se admiraba.

-No quiera imaginarse la de arrugas que se le habían criado en su hermoso rostro. Se lo conté a un médico amigo y enseguida me puso en contacto con un cirujano plástico, que tras pasar mi esposa una semana alojada en su clínica, me la devolvió hecha un pimpollo. Tal como ahora mismo se la puede contemplar!

Ahí comenzaron mis problemas : Ella quedó de 30 pero yo seguía rumbeando para los 70! Pasado de peso, fajado a causa de la lumbalgia, oliendo a pomadas de las que alivian a los caballos de carrera ...Me impuse un régimen adelgazante. El hambre me mataba día y noche. El malhumor pasó a ser mi hermano siamés . ¿Qué pintaba yo junto a una dama hermosa y joven ? Suerte que un día me desmayé de tanto ayuno y me internaron en un Hospital de los privados.

Un mes me tuvieron los doctores transportándome en sus camillas por los pisos. Creo que fue el mejor gasto que hice en mi vida ! Me pusieron cabello donde me faltaba, me levantaron las cejas, me afilaron la nariz, me quitaron la papada, arreglaron la cadera y volví para la casa hecho un galán de película. Observe: qué biceps ! Qué pectorales ! Pasadas tres semanas regresé al Hospital más confundido que un ciudadano ruso en la Isla Martinica.

- Doctor, estoy bárbaro. El problema es que todo el vigor que me han dejado en brazos y tórax, me ha desaparecido de la cintura para abajo !!

Y el médico – zorro entendido en estas cuestiones - me responde :-Tranquilo hombre! La Medicina moderna le devuelve su apariencia de hace cuatro décadas , lo cual no es poco. Y ahora viene lo mejor: Porque en realidad, lo que Ud. espera es algo así como un milagro. Sentirse otra vez joven , impetuoso, vencedor en todas las batallas. Eso lo va a lograr porque estos cambios exteriores , nada significarían si no se hubiese vuelto a enamorar de su esposa. El Amor, ese es el que hace los Milagros verdaderos y mayúsculos !! Los cirujanos apenas les ayudamos con el bisturí.-


Ilustración: www.pinterest










Comentarios

Albada Dos ha dicho que…
El amor rejuvenece, porque apela a las emociones por estrenar de nuevo. Y es esa sensación de estreno lo que se nota a simple vista.

Por eso los cirujanos no pueden hacer sentirse más joven sino a quien sólo ve la parte exterior

Un abrazo

Entradas populares

Vistas de página en total